Ha pasado mucho tiempo desde que llegasen a nuestros ordenadores dos de los mejores sistemas operativos de Microsoft, Windows XP y Windows 7. Y, después los batacazos sufridos con Windows Vista y Windows 8, Microsoft espera que su nuevo sistema devuelva a la multinacional el estatus que se merece. Tras las simplonas cifras obtenidas con Windows 8, la empresa tecnológica aspira a conseguir 1.000 millones de usuarios de Windows 10 en los próximos dos años. El nuevo sistema llegó a nuestros ordenadores el pasado 29 de julio y, desde entonces, han sido muchas las opiniones al respecto, tanto a favor como en contra.
Con este nuevo sistema operativo, Microsoft pretende una vuelta a su esencia, así como distanciarse de su predecesor (puede que por eso haya elegido un número más redondo que lo aleje de Windows 8). Por ello, con Windows 10 hemos recuperado el tan anhelado por todos «botón de inicio», lo que supone una vuelta al escritorio clásico. No obstante, encontramos muchas mejoras y nuevas utilidades en esa vuelta al escritorio clásico. El Menú Inicio de Windows 10 no es algo inmóvil y cada cual puede configurarlo a su gusto de múltiples maneras. Con la posibilidad de personalizar las baldosas del menú (o incluso eliminarlas): elegir qué baldosas queremos, cambiar su tamaño, anclarlas o desanclarlas del menú de inicio. Todo un sinfín de posibilidades.
El escritorio cuenta con el llamado el Action Center o Centro de Actividades, para la visualización y gestión de las notificaciones (algo pensado más para las tablets y smartphones que para los ordenadores de mesa). Sin embargo, se pueden desactivar fácilmente. Por otra parte, también cuenta con un concepto ampliamente conocido por los usuarios de Linux y OS X: la Vista de Tareas que permite gestionar los nuevos escritorios virtuales y echar un vistazo a todas las aplicaciones abiertas.
Con Snap y la posibilidad de acoplar hasta cuatro ventanas a los bordes de la pantalla, quienes tengan grandes monitores o pantallas pueden trabajar de forma cómoda y controlada con hasta cuatro aplicaciones al mismo tiempo. Algo que podremos configurar a nuestro gusto en el apartado Multitarea de Configuración del Sistema.
Este sistema operativo se basa en un concepto de multiplataforma y multidispositivo, englobando el desarrollo del Windows de escritorio, Windows RT, Windows Phone y hasta la dashboard de Xbox One. Respecto a los requisitos oficiales de nuestro hardware, tal y como se esperaba, con bastante bajos y se asimilan a los de Windows 7 y Windows 8. Por tanto, actualizar al nuevo sistema será fácil y, durante el primer año, gratuito para los usuarios de estos antiguos sistemas. El contrapunto lo encontramos para los usuarios que aún utilicen otras versiones anteriores puesto que tendrán que pagar por una licencia de Windows 10 Home o Windows 10 Pro. Además, muchos usuarios descontentos con el sistema operativo denuncian que volver al sistema anterior es muy complicado para aquellos usuarios que no tienen conocimientos avanzados de ordenadores.
Otro aspecto positivo lo encontramos en Microsoft Edge, el nuevo navegador web, que convivirá en un principio con Internet Explorer. Microsoft Edge mejora el rendimiento gracias al nuevo motor de renderizado y una interfaz que apuesta por el minimalismo en su máxima expresión siguiendo la tendencia de este tipo de aplicaciones. En un principio, este nuevo navegador web será solo compatible con Windows 10. Debemos destacar dos grandes funciones: la posibilidad de anotar y dibujar sobre páginas web para luego compartirlas, y la lista de lectura, que permite que nos olvidemos de banners publicitarios y otros elementos «intrusivos».
Para los más jugones, a parte de la compatibilidad con Xbox, Microsoft plantea una integración completa de los juegos de la consola con el nuevo sistema operativo y presenta un nuevo conjunto de librerías multimedia, DirectX 12, dedicada al desarrollo de programación de videojuegos. Al igual que Microsoft Edge, también será esclusivo de Windows 10. Sin embargo, muchos echarán de menos el conocido Windows Media Center en el nuevo sistema, por lo que no podremos reproducir DVD de manera nativa y necesitaremos un software independiente.
Respecto a la seguridad este sistema cuenta con bastantes mejoras, comenzando por la implementación de la autenticación en dos pasos y además almacenará los credenciales de usuarios en un “contenedor” seguro que no será expuesto, incluso si piratas informáticos acceden al código del kernel y contará con nuevo sistema de autenticación, Windows Hello y Passport (para entornos empresariales) que utiliza sensores infrarrojos, lectores de huellas dactilares y cámaras para conseguir de forma conjunta una identificación más segura.
Frente al apartado de seguridad, se han producido muchas quejas por parte de usuarios respecto a la privacidad de Windows 10. Las principales quejas relativas a la privacidad han sido las siguientes:
- Comparte tu información personal con Microsoft por defecto (aunque desactives todo el envío de datos).
- Usa tu conexión de internet para ayudar a otras personas a descargar aplicaciones o a actualizar sus PC.
- Windows 10 cuenta con una nueva función llamada Wi-Fi Sense que te permite conectar automáticamente a tus amigos a tu red Wi-Fi sin tener que darles tu contraseña.
Por último, una de las grandes novedades del nuevo sistema de microsoft es el asistente digital de voz, Cortana, que es el corazón del sistema operativo. Desplaza totalmente a un segundo plano a Bing, la plataforma de búsqueda y servicios que Microsoft trató de impulsar hace unos años junto al lanzamiento de Windows 8. Ese buscador y servicios como Bing Maps son parte fundamental del funcionamiento de Cortana, pero es este asistente de voz el que toma el protagonismo.
Será multitarea porque podrá ejecutar varias órdenes a la vez. Podremos solicitarle la apertura de una aplicación, pedir que nos muestre la galería de fotografías tomadas en un tiempo determinado, búsqueda de archivos en el almacenamiento local o los almacenados en nube, la apertura de una presentación, el envío de un correo electrónico y un largo etc. No se limita a responder preguntas sencillas, sino que trata de adelantarse a nuestras necesidades. Nos muestra información relacionada con nuestra ubicación y nuestro historial de uso del PC.
La integración de Cortana con Microsoft Edge también es destacable, y podremos por ejemplo seleccionar parte de un texto o una palabra de una página web para luego pulsar con el botón derecho del ratón sobre ella y seleccionar la opción «Preguntar a Cortana». Al hacerlo nos aparecerá una barra lateral en la que el asistente de búsqueda nos mostrará información relacionada con ese término o términos.
El nuevo concepto que ofrece Windows 10 todavía tiene recorrido por delante y se esperan nuevas actualizaciones y mejoras pero, hasta el momento, este nuevo sistema operativo promete bastante. ¿Qué opináis?